La señorita Rock'N'roll observaba las vistas de la gran ciudad. No tenía nada que ver con aquellos paisajes neoyorkinos que aparecían por televisión.
No había esas masas de gente andando hacia ningún lugar, ni las bolsas de las compras de las pin up, ni yuppies hablando sin parar, ni los cool haunters gafa-pasta sentados con sus Starbucks buscando algo que lanzar.
Ni siquiera un japonés vestido de dibujo manga.
Ni siquiera un japonés vestido de dibujo manga.
Tampoco es tan diferente, pensó.
Pero tampoco estaban las señoras sentadas en las puertas de sus casas tomando el "fresco".
Ni los
Ni los
Ni los
(Vaya, ya no recuerdo apenas nada).
Lo bueno (o no) es que si un coche me pita por la calle, ya no me giro. ¿Quién me va a conocer aquí?
Eso es lo bueno.
Eso es lo bueno.
Que me puedo cambiar el nombre (si no lo he hecho ya...)
e inventarme una vida...más normal.
e inventarme una vida...más normal.
1 comentario:
Bienvenida pues a tu nueva vida. Quizá no haya cool haunters, ni Starbucks, pero seguro que en el super puedes encontrar un Kack Daniels. Los molinos de Don Quijote, ahora seguro que son generadores eólicos
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